Por alguna razón histórica, son los
cultivadores de la literatura aquellas personas que, contrario a
otras profesionales, gustan con frecuencia seudónimos que, llegado
el caso, algunas a veces se popularizan de tal forma que borran por
completo el nombre real por lo que a veces resulta imposible conocer
sus verdadero nombres y apellidos, tal es el caso del primer
periodista que en Camagüey escribió, en los inicios de 1907, sobre
el desarrollo de la radio, como este escribió bajo el seudónimo de
D. Téctor, ha
resultado imposible identificar al pionero del periodismo radial
en nuestra `provincia.
Se conoce que en Camagüey, por ejemplo,
Nicolás Guillén escribió por un tiempo, allá por los inicios de
su carrera, bajo el nombre de Interino.
El comentarista social de alto vuelo fue Rafael Perón de la Cerda se
hizo firmar Farela, y
así conquistó gran renombre, mientras que Sainete
fue el popular reportero de la década de 1950 Agustín Romeo Peréz,
que por cierto llego a ser alcalde de nuestra ciudad a inicios por
aquellos años.