Echaron en un tanque de tasajo a un niño y ahora la madre los acusa

Camagüey, 16 de noviembre de 1932;  Ante el cabo de carpeta en la Primera Estación de la Policía, se presentó la ciudadana nombrada Soifé Valdés, de la raza negra, de 32 años de edad, vecina que es de Bembeta al final y sin oficio reconocido, procediendo a acusar a los ciudadanos Pedro Lazaña, de 52 años de edad, mestizo y jornalero de la tasajera. La Criolla y a José María de la O, de 29 años, blanco y trabajador de la misma fábrica, por ser los mismos que en la tarde de ayer arrojaron en un tanque donde se procesa tasajo a su menor hijo José Victoriano, de once años de edad.

Conducidos los dos ciudadanos ante el carpeta, estos demostraron ser en efecto trabajadores de la tasajera de referencia, quienes alegaron en su defensa que desde hace mucho tiempo éste tal José Victoriano, quien de costumbre deambula por el lugar, porque no va a la escuela y a donde parece no piensa ir jamás, les viene molestando, echando basuras y botellas en los tanques de proceso que ellos atienden y que cuando le llaman la atención el José Victoriano les mienta la madre y les lanza piedras, sin que Soifé  haga nada por mantener a buen recaudo al menor, por el contrario, cuando se presentaron en la vivienda del muchacho para dar las quejas a la madre, Soifé les recibió con un machete diciéndoles que no quería volver a oír quejas de su hijo.
Cuando el carpeta de esta estación, Sr. Marcelo Martínez, le pregunto a Soifé la causa de aquel comportamiento cuando fueron a requerir su atención, ésta declaró que “cualquiera tiene un mal día”.    

Que ayer, cansados de las majaderías del menor y en oportunidad en que lanzaba un gato  muerto al interior de uno de los tanques, luego de haberle dado una pedrada en la cabeza a José María de la O, este, ayudado por Lázaro Lazaña, pudieron agarrar al muchacho y que entre los dos, solamente para asustarlo, lo lanzaron  con ropa y todo dentro de uno de los tanques de tasajo, que apenas tiene tres metros de agua, dejando que el niño se fuera luego, no sin antes recibir de José Victoriano una lluvia de ladrillazos, uno de los cuales dio en la espalda de Lazaña, dejándole como muerto por media hora, mientras que de la O recibió un botellazo del cual debió ser atendido en el Hospital de Emergencias, donde le dieron ocho puntos en la frente, de lo cual presenta certificado médico y solicita se adjunte al acta. Del caso se dio cuenta al Juez Correccional.

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